El activista iraquí Salwan Momika, que quemó varias copias del Corán en 2023 fue asesinado a tiros en Hovsjö, Södertälje, el miércoles por la noche, mientras hacía un directo desde su cuenta en TikTok.
La policía detuvo a cinco personas bajo sospecha de estar implicadas en el asesinato.
Al día siguiente, el tribunal daría la sentencia en el juicio que enfrentaba Momika por incitación al odio contra un grupo étnico. Ahora, esta causa ha sido desestimada.
Por: Redacción
A las once de la noche del miércoles, el conocido activista iraquí Salwan Momika se encontraba en su departamento en Hovsjö, en la comuna de Södertälje transmitiendo un video en directo en la plataforma de TikTok. Unas dos mil personas seguían la transmisión, cuando Momika comunicó que haría una pausa, y salió al balcón a fumarse un cigarrillo.
Entonces se escuchó un disparo, y después cuatro más. Al llegar la policía, encontraron el cuerpo sin vida del hombre, en tanto que la transmisión aún continuaba, hasta que un agente la apagó.
Salwan Momika vivía en una dirección secreta y gozaba de protección policial cuando hacía sus actividades en las que criticaba duramente al Islam. Sabía que una amenaza de muerte pendía sobre su cabeza, y que se había ofrecido una recompensa por ella.
El 1 de enero había publicado un video en TikTok, en el que dijo:
– Un médium libanés predijo que moriría en 2024. Les pido a todos Uds. que le deis las gracias. Díganle que Salwan Momika está vivo. Y seguirá luchando contra el islam.
El activista causó gran revuelo en el verano de 2023, cuando quemó ejemplares del Corán en varias ocasiones, en Estocolmo, en señal de protesta contra el Islam. Esto ocasionó una crisis entre Suecia y el mundo musulmán justo cuando el país se encontraba en medio del proceso de adhesión a la OTAN, con Turquía como principal opositor.
Salwan Momika llegó a Suecia desde Irak en 2018, y posteriormente se le concedió un permiso de residencia de tres años, el que había sido ampliado por un año más. Nunca consiguió el permiso de residencia permanente, pero tampoco podía ser deportado a su país natal, puesto que allí le esperaba la tortura y, muy posiblemente, la muerte.
Al momento de su asesinato, él y su compañero Salwan Najem enfrentaban una querella judicial por incitación al odio, debido a declaraciones hechas en relación a la quema del Corán. El veredicto se comunicaría el jueves a las 11 de la mañana, pero ahora el fiscal ha retirado los cargos. Está por verse si el tribunal dictará sentencia respecto a Najem.
Este mismo declaró a los medios que la policía sueca no había sido capaz de proteger a Momika. Y que en sus redes sociales le han comunicado que “tú eres el próximo”.
La policía detuvo a cinco personas por sospecha de asesinato, sin embargo, dos días más tarde fueron puestos en libertad por falta de pruebas.
Por su parte el primer ministro Ulf Kristersson declaró en una conferencia de prensa sobre la última ola de violencia, el jueves: “Puedo garantizar que los servicios de seguridad están muy involucrados en esto porque obviamente existe el riesgo de que también haya una conexión con poder extranjero”.