La empresa de telecomunicaciones Ericsson ha sido denunciada por complicidad en crímenes de lesa humanidad en Irak. La denuncia trata de que la empresa indirectamente haya podido beneficiar a la organización terrorista Estado Islámico. La fiscal de crímenes de guerra, Reena Devgun, está ahora a cargo del caso, que se está siendo investigado en la Unidad Nacional contra el Crimen Internacional y Organizado.
Fuente: Dagens Nyheter. 21-03-2022
En una revisión interna, en 2019, Ericsson encontró un catálogo de irregularidades con respecto a las gestiones de la compañía en Irak entre 2011 y 2019. Se trataba de sobornos, dobles lealtades, intermediarios, pagos a destinatarios opacos y posiblemente pagos a la secta terrorista Estado Islámico, en el marco de la expansión de la red telefónica móvil, en Irak.
Sin embargo, el informe no se hizo público hasta febrero de este año, y solo después de que el programa de la televisión estatal sueca, SVT, Uppdrag Granskning (“Misión investigar”), recibiera la investigación secreta a través de una filtración, hiciera más y más preguntas.
El caso ha cobrado una dimensión extra en el sentido de que el Departamento de Justicia de EE. UU. (DOJ) considera que la falta de información constituye un incumplimiento del acuerdo alcanzado con la empresa en diciembre de 2019. Esto significó una multa de 10.000 millones de coronas suecas y tres años de investigación del trabajo ético de la empresa debido a sobornos en, entre otros, Yibuti.
Uppdrag Granskning se asesoró con dos abogados suecos de derecho internacional, a quienes instó a examinar el informe. Ambos consideran que Ericsson puede ser culpable de complicidad en crímenes de lesa humanidad. Se trata de que la empresa ha sido "indiferente" a brindar apoyo financiero al Estado Islámico, lo que fortaleció a la organización.
Ahora hay una denuncia ante la policía por la gestión de Ericsson en Irak. Así lo confirma la fiscal Reena Devgun, de la Unidad Nacional contra el Crimen Internacional y Organizado, quien lleva el caso.
- No puedo decir mucho más que recibí un informe policial y que vamos a tomar el caso.
¿Qué significa eso?
- Esto significa que lo hemos recibido y que nos encargaremos del caso. Todavía no he tomado una decisión sobre si iniciar o no una investigación judicial.
Reena Devgun fue una de las fiscales en el caso de la mujer de 49 años del oeste de Suecia que fue condenada a seis años de prisión por un grave crimen de guerra por no impedir que su hijo se convirtiera en niño soldado del Estado Islámico. Devgun enfatiza que este tipo de investigación es complicada.
- Tenemos un requisito de urgencia sobre nosotros, pero nuestros casos son más complejos que un caso normal, por lo que no sé en este momento cuándo podemos tomar una decisión.
¿Qué pasa con la denuncia?
- No lo quiero comentar.
¿Se trata de violaciones del derecho internacional, complicidad en crímenes de lesa humanidad?
- Se siente como si tú mismo tuvieras la respuesta.
Ericsson ha estado muy inestable este último tiempo: el valor de las acciones se ha desplomado, la Bolsa de Valores de Estocolmo está examinando si la empresa ha incumplido con su deber de proporcionar información y ahora hay exigencias de que se niegue la aprobación de la gestión a partes de la junta directiva.
Sin embargo, antes de la asamblea general de accionistas del próximo martes [29 de marzo] , el directorio de Ericsson respalda a su director ejecutivo.
"El director del consorcio, Börje Ekholm, tiene la plena confianza de la directiva, no solo para llevar a cabo con éxito las operaciones de la empresa, sino también para liderar el trabajo de cambio de la organización en materia de ética y verificación del cumplimiento de las reglas", escribe el presidente Ronnie Leten en un comunicado de prensa el lunes.
El 27 de febrero, la televisión estatal sueca transmitió el programa Uppdrag Granskning - Ericsson y el Estado Islámico. Foto: Pantallazo Svt.se.