Por primera vez en la historia, un primer ministro es rechazado por el Riksdagen. A las 11 de la mañana se llevó a cabo la votación con motivo de la moción de censura presentada por los Demócratas Suecos en contra de Stefan Löfven. Esta arrojó un resultado de 181 votos a favor de la moción, 109 en contra y 51 abstenciones. Ocho diputados estaban ausentes.
Ahora el primer ministro tiene dos alternativas: llamar a elecciones extraordinarias o dimitir.
Por: Marisol Aliaga
Nunca en la historia de Suecia había ocurrido. Que un primer ministro fuera derrocado en una votación en el Parlamento.
Las veces anteriores (unas 11) el ministro en cuestión había presentado su dimisión, antes de ser sometido a la votación en el plenario.
¿Por qué Stefan Löfven no hizo lo mismo?
Al parecer porque quiere hacer uso del plazo que le da la Constitución. Löfven tiene ahora una semana para decidir si convocará a elecciones extraordinarias o si dimitirá. Cumplida esa fecha, será destituido por el presidente del Parlamento, a quien le corresponderá hacer los sondeos necesarios en la búsqueda de un nuevo primer ministro.
Esto ya lo hemos experimentado anteriormente, después de las elecciones de 2018, cuando Suecia estuvo sin gobierno durante dos meses. Las posiciones estaban totalmente estancadas, luego de unos comicios muy ajustados y el no poder llegar a acuerdos.
Al final, Stefan Löfven llegó a un acuerdo con dos partidos de la derecha, y se comprometió a una lista de exigencias de 73 puntos. Uno de los puntos, el 44, lo llevó ahora a convertirse en el primer líder que es depuesto en una moción de censura en el Parlamento sueco de la historia.
¿Cómo se llegó a esta situación?
Luego de que la líder del Partido de Izquierda, Nooshi Dadgostar, anunciara que su partido le retiraba el apoyo al gobierno de Stefan Löfven, el 17 de junio 36 diputados exigieron que el Riksdag votara una moción de censura contra el primer ministro (S).
Los Demócratas de Suecia (SD) apoyaron de inmediato la moción de censura en contra de Stefan Löfven. A ellos le siguieron el partido democratacristiano (KD) y el conservador (M).
Para que una moción de censura contra el primer ministro pueda ser presentada, se requiere del respaldo de más de la mitad de los diputados, vale decir al menos 175.
Este lunes, 181 diputados, del SD, M, KD y V votaron a favor de la moción de censura, derrocando al premier sueco.
Si el Riksdag concluye que no tiene confianza en el primer ministro, todo el gobierno debe renunciar o anunciar elecciones adicionales.
Después de la votación en que fue depuesto, Stefan Löfven declaró, en rueda de prensa telemática:
- Ahora el Partido de Izquierda se unen a los partidos de derecha, los conservadores, los democratacristianos, los Demócratas de Suecia, sin temer nada en común y sin tener un plan para el futuro. Es lamentable. Ahora tenemos esta situación, el gobierno ahora tiene una semana de decidir, hablaremos con nuestros socios, pero estamos preparados para asumir la responsabilidad de liderar el país. Estamos a disponibles para liderar el país. Mi enfoque principal es, ha sido y será hacer lo que es mejor para Suecia.
El presidente del partido conservador, Ulf Kristersson, se mostró muy sonriente con el resultado:
- Yo estoy dispuesto a formar un nuevo gabinete ahora mismo lo he dicho desde las elecciones pasadas. Hay condiciones para formar un gobierno de derecha, si los partidos en Suecia quieren tener un mejor gobierno. Respecto a elecciones extraordinarias, no creo que la mayoría de la gente lo quiera, pero es solamente Stefan Löfven quien puede decidirlo.
Tanto él, como el líder de los Demócratas de Suecia (SD) han querido deponer al gobierno de Stefan Löfven. Curiosamente ahora esto se hace realidad gracias a un partido con el que no tienen nada más en común que esto: el partido de Izquierda.
- El punto de partida por el cual comenzamos esto es que queremos un nuevo gobierno. Un mejor gobierno. Ahora es Stefan Löfven quien tiene la pelota. Si quiere convocar a elecciones extraordinarias tiene derecho a hacerlo. También puede dimitir, o esperar el curso de la semana. Vamos a ver qué pasa, dijo Jimmie Åkesson (SD).
La líder democratacristiana Ebba Bush, concordó con Åkesson.
- Es Stefan Löfven, quien recién fue depuesto, quien tiene que elegir qué camino tomar. Nosotros estamos listos para todas las alternativas, también a ser partes de un gabinete de gobierno, pero con un primer ministro de derechas.
La líder del Centro, Annie Lööf, en cambio, y promotora principal del tema por el cual se desató la crisis, las marknadshyror, no estaba muy conforme con la votación:
- Bueno, ahora los Demócratas de Suecia junto al Partido de Izquierda han tumbado a un gobierno socialdemócrata. Ahora Stefan Löfven debe decidir cuál será el camino hacia adelante. Nosotros votamos por una continuación del Acuerdo de Enero y estamos dispuestos a tolerar este gobierno a cambio de que continuar con el acuerdo.
Sin embargo, la líder del partido Liberal declaró, por su parte, que no estaba interesada en seguir con el Acuerdo de Enero.
- En las rondas de negociaciones, o si hay elecciones extraordinarias, vamos a priorizar el formar un gobierno de derecha. Queremos conversar con todos los partidos burgueses para poder llegar a un acuerdo sobre cómo esto se podría conformar, dijo Nyamko Sabuni.
Con esto cae la conformación que había existido hasta ahora, en el Acuerdo de Enero. Sabuni también manifestó no tener reparos en elecciones extraordinarias. Aunque – según las ultimas encuestas - no consigue alcanzar el cuatro por ciento mínimo que se requiere para mantenerse en el Parlamento.
Algo que no es fácil de entender, no obstante, al menos a primeras, es la posición de Nooshi Dadgostar. Porque primero votó en contra de Stefan Löfven, pero luego declaró que le gustaría que asumiera nuevamente el cargo.
- Hemos hecho todo lo posible para que este día nunca llegase. Hemos sido muy claros acerca de nuestro apoyo a Stefan Löfven. Él ha estado consciente durante dos años y medio que no puede llevar adelante la propuesta de marknadshyror. Hemos tratado de resolver esto durante todo el mandato pero no hemos sido escuchados.
- Nosotros queremos que Stefan Löfven vuelva a ser primer ministro, pero sin marknadshyror. [Sin alquileres regulados por el mercado].
Y, en su intervención en el parlamento, antes de la votación dijo que lo único que el Partido de Izquierda había hecho era cumplir la promesa a sus votantes.
- No es el Partido de Izquierda el que ha abandonado al gobierno socialdemócrata. Es el gobierno socialdemócrata el que ha abandonado al Partido de la Izquierda y al pueblo sueco. En tal situación, es nuestra responsabilidad, como un partido que está del lado de los empleados e inquilinos cumplir con nuestras promesas. Por eso el Partido de Izquierda votará hoy a favor de la moción de censura contra el primer ministro, dijo Nooshi Dadgostar.
Debate en el Parlamento sueco este lunes, en la votación por la moción de censura contra el primer ministro Stefan Löfven. Foto: Pantallazo SVT.
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